EL CONGRESO EN CLAVE DE LA...




...LACTANTES

Trío administrativo
condición muy esencial,
Legislativo... Ejecutivo
y de ley... el Judicial.

Dieciocho constituciones
han reglamentando al país,
incontables convulsiones
minando están su raíz.




El Poder Legislativo / vital igual que los tres, / requiere ser productivo / y muy constante a la vez.
Legislación suponemos / personifica corrientes, / variadas ideologías / liman inconvenientes.
El Congreso debería / ser legítima expresión, / poder y soberanía / de toda la población.
Veintidós territorios / conforman nuestra Nación, / cimientos muy promisorios / deber regir toda acción.

“Son más de cien voluntades / investidos de tenaces, / desnudos de nimiedades / requieren ser muy capaces”.
Son de variadas tendencias / las provincias representan / son floridas sus sapiencias / muchos títulos ostentan.
Pocos pagan por muchos / muchos opacan a pocos, / la mayoría son duchos / y otros se hacen los locos.
Deber es reconocer / sin llegar al juramento, / méritos muy acertados / en un exiguo por ciento.

Los días martes empiezan / porque “dizque” son fuereños, / igual “tragedia” atraviesan / circundantes y quiteños.
Ni llegan a veces al viernes / poco hacen poco avanzan, / todo lo dejan en ciernes / contradicen y amenazan.
Muy poco es lo despachado / reina la disociación, / prima sólo el negociado / y que espere la Nación.

De la tele han saltado / a las listas y al Congreso, / y una vez bien asentados / ¿cómo partimos el queso?.
Parloteaban en las calles / llenos de euforia canina, / hoy se los ve bufando / hasta en la peor vitrina.
Antes abanderaban / “lo que en la calle se vió”, / hoy nos regocijaría / “lo que el congreso calló”.

No son ganas de joder / coincidimos asombrados, / que en la entrevista primera / de nada están enterados.
En siguientes entrevistas / mañas cogen sin criterio, / y esas mañas les persigue / haciendo de todo un misterio.
Al acercarse la prensa / preguntas a formular, / al no convenir respuestas / echan mano al celular.
Pero si tienen “negocios” / o dolos por denunciar, / a veces sin ser probados / no se olvidan de brillar.

Inmunidad mal usada / leguleya su acción, / ley mal interpretada / requiere maduración.
Ayer fundían micrófonos / enredados entre vivos, / hoy variando los tonos / arremeten muy altivos.
Antes narraban contentos / comerciales goles juego, / hoy se los ve violentos / hasta con armas de fuego.
Gran culpa es de los medios / por citarles a lucir, / quizás los llaman por que ellos / no tienen ya qué decir.

Los debates maravilla / comerciales incluídos, / afirman al candidato / remiendan a los partidos.
Los eternos preguntones / nerviosos los entrevistan, / mojando sus pantalones / para que no los desvistan.
Entonces en tono disculpa / y casi nada triunfantes, / no les queda otro decir: / bienvenidos anunciantes.

Gobierno nuevo subió / todos callan nadie opina, / y si al fin se equivocó / todos le hacen cecina.
Chorizo de consejeros / siempre son muy necesarios, / mafiosos con muchos ceros / comerciando escapularios.
Asesores bien pagados / suplentes y secretarias, / guardaespaldas bien armados / chóferes y “parti-darias”.
Es decir cada honorable / vasto séquito ostenta, / vergüenza nada aceptable / para quien nos representa.

Ciertos “honorables” tienen / hasta cuatro secretarias, / cuando lo que necesitan / es un par de parvularias.
“Pueblo, pueblo ecuatoriano / escuchamos cada caso, / pueblo, pueblo ecuatoriano / cuidémonos de un mal paso”.
Liderazgos compartidos / a futuro convendrá, / varios piensan más que uno / y eso sí nos mantendrá.
Ni siquiera son solventes / al sentarse a legislar / más de cinco asesores / alcahuetean su andar.

Por la forma de objetar / el sistema de elección, / no conviene aplicar / el métodito... De Wong.
Pues sumando los totales / ingresan las minorías, / y algunos reclaman vales / reponiendo alcancías.
Por la ya muy  conocida / alta presión arterial, / no nos conviene aplicar / ni el método imperial.
No conviene para algunos / que vuelen las minorías, / felinos y hasta vacunos / desprecian las mayorías.

Tres mil cien dolaritos / es su básico mensual, / pasajes y buen transporte / amontonan el total.
Aparte de esto reciben / setecientos más mensual, / las dietas no se cohíben / seis mil quinientos ¡nada mal!.
Lactan seis mil quinientos / cada mes... como canguil, / esto por doce meses / son setenta y ocho mil.

No hay control de entrada, / de salida... peor pensar, / diez mil dólares les prestan / cero interés sin chistar.
Por viáticos al exterior / diario reciben quinientos, / sí el destino es el interior / reciben apenas doscientos.
Cuando llega Navidad / sólo seis mil les regalan, / licores y prosperidad / que de una se resbalan.

Cada honorable ostenta / tres tipos de asesores. / y cada uno presenta / un cúmulo de gestores.
Asesor bien titulado / otro sí experimentado, / y completando los cuatro / dos flamantes pre graduados.
Asistentes y además / con destrezas y aplomo, / como no permiten más / dos resistentes con plomo.

El bien titulado gana / sólo seiscientos cuarenta, / y sumando beneficios / llega casi a ocho treinta.
El otro experimentado / sólo seiscientos treinta, / y sumando beneficios / llega casi a ocho treinta.
Los otritos pre graduados / sólo quinientos treinta, / y sumando beneficios / llegan casi a seis ochenta.

“Llegar a di-putadores / gran orgullo simboliza, / engordando asesores / que cobran muertos de risa.
Ser solventes en discursos / en lenguaje y escritura, / ¡no! que les paguen los cursos / en retórica y costura.
Lactantes “tierna” palabra / bien aplicada al Congreso, / oremos un abracadabra / para que auditen el queso.
Queso a queso a degustar / a los lactantes de ahora / cuanto quieren apostar / que volverán sin demora.

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